sábado, 6 de septiembre de 2008



Tan profunda la tristeza y el dolor que llevo acá... No me dejes, no te dejes, vos estás para algo más... La vergüenza cae en mi pecho, alimento de mi puta sobriedad... La arrogancia es mi condena, mi ignorancia,onsecuencia de una causa no muy justa... Pero esta vuelta no es de mí que voy a hablar, es la historia de una madre que con dolor debo llamar... Patria que por cruel y por avara, crió hijos despechados, despiadados, deshonestos y que algunos quedaron huérfanos...

No hay comentarios:

¿Te has preguntado por el origen de ese dolor que atraviesa tu alma como una perdigonada cada vez que te asomas al abismo? ¿Ese mareo, ese resbalon hacia la nada cada vez que la negrura te hipnotiza? ¿No sientes que todos los besos esconden ese miedo a lo que no hay? ¿Y que todas las promesas y melodias solo espantan el presentimiento de estar cayendo al vacio? Es porque el abismo y tu alma estan construidos con la misma sustancia, ese agujero insondable que es el cosmos sacia su sed con tus labios. Eres la sombra de una pregunta que no tiene respuesta, tus disfraz de ser oculta tu negror. Eres un escorpion oculto en el vientre oscuro del infinito preparando su veneno para una unica ensartada. Eres la flecha de luz que busca clavarse en si misma. Asi estamos, huyendo por el cosmos de nosotros mismos, queriendo saber lo que no queremos saber. Y el abismo, que tampoco comprende, nos busca en cada momento para exclamarnos su secreto: "Infinita es la ausencia y eterna la soledad"

~ Don Lunfardo y el Señor Otario ~